escrita y dirigida por Ignasi Vidal.
una producción de: Olympia Metropolitana S.A., Emilia Yagüe producciones y Unahoramenos producciones.
con Manu Baqueiro, Celia Vioque, Sara Rivero, Daniel Freire y Eva Isanta.
con Manu Baqueiro, Celia Vioque, Sara Rivero, Daniel Freire y Eva Isanta.
18 de agosto de 2017. Centro Niemeyer, Avilés. 90’ aprox. Estreno absoluto.
Ocho encuentros de parejas. En lugares como un bar, un piso, un parque o una inmobiliaria. Algunos son reencuentros que podrían consolidarse. Otros prologan amores perfectos que luego quedarán truncados. También hay rupturas que no llegan a serlo. Y siempre la turbación de sentir que el amor ideal ha pasado justo al lado.
Ocho diálogos magníficos en una rayuela. La que los actores van pintando y levantando para componer cada cuadro. Y también la de Cortázar en que se inspiran estas historias cruzadas. En el capítulo séptimo de su novela está la clave del tema y el tono de esta obra que esboza amores posibles, deseables y amortizados. Antes de comenzar, Ignasi Vidal salió al escenario para que todos pudiéramos compartir con un minuto de silencio la emoción por lo que ayer sucedió en Barcelona. Luego cambió el motivo pero la emoción siguió. La posibilidad de hacer real aquel juego amoroso que imaginó Cortázar. La conciencia de que es lo más efímero lo que resulta perdurable. La aceptación de que el azar teje y desteje lo bueno de la vida. Esos son algunas de las cosas que Ignasi Vidal nos muestra con El cíclope. De él ya hemos visto en el off del Niemeyer otras obras estupendas. El año pasado Dignidad en la que, además de autor y director, era también intérprete. Y en enero de este año El plan, otro texto magnífico que sacaba el mejor partido del hiperrealismo masculino. Hoy ha sido una noche de estreno con cinco actores impecables, un texto conmovedor y una puesta en escena tan sencilla y bien trabada como hermosa y pertinente. Y con el auditorio lleno ha conseguido mantener esa cálida intimidad que solemos disfrutar en el club teatral que tenemos justo debajo. Así que, tras este estreno avilesino, El cíclope y otras rarezas del amor debería tener mucho éxito en otros teatros. El trabajo de Ignasi Vidal bien lo merece.