producción: GM Teatros.
con Concha Velasco.
3 de marzo de 2017. Teatro Palacio Valdés, Avilés. 90’ aprox.
La reina Juana se confiesa. Lo hace ante el sacerdote enviado por Felipe II para que compruebe si está endemoniada. Esa confesión será un repaso a su vida. La de la hija de los reyes más católicos. La de la madre y abuela de los reyes más imperiales.
Concha Velasco se mete en el papel de esta mujer apodada siempre como loca y lo defiende con brío durante hora y media. Es un soliloquio intenso en el que una Juana anciana va repasando y evocando distintos momentos de su vida. Junto a la interpretación de la actriz destaca una puesta en escena muy sobria (apenas una cama y un reclinatorio) en la que una iluminación elegante y eficaz y unas proyecciones muy oportunas van acompañando estas confesiones probables de un personaje histórico que estuvo siempre entre paréntesis. Concha Velasco ha recibido con emoción los aplausos de un teatro abarrotado al que ha tenido el detalle (y casi la necesidad) de dirigir una palabras al final de la obra para decirnos lo bien que se ha sentido esta noche en Avilés. Ha prometido volver. Y será bien recibida.