viernes, 25 de agosto de 2023

Hechos y faltas

autoría: Jeremy Kareken, David Murrell y Gordon Farrell. Versión y dirección: Bernabé Rico
una producción de TalyCual.
con
Ángeles Martín, Antonio Dechent y Juan Grandinetti.


25 de agosto de 2023. Teatro Palacio Valdés, Avilés. 75 aprox. Estreno absoluto.


La directora de Harper's Magazine encarga a Jim Fingal, un joven y diligente becario, la verificación de los datos y los hechos incluidos en un artículo que ha escrito John D'Agata. Él es un afamado periodista que ha redactado un texto soberbio sobre las circunstancias del suicidio de un joven en Las Vegas. La crónica de D'Agata tiene dieciséis páginas, pero el documento con los comentarios y correcciones factuales que Fingal entrega a la directora ocupa más de cien.

"El relato mata al dato". Esa afirmación demoledora aparece una y otra vez en El malestar de las ciudades, el inquietante y magnífico libro de Jorge Dioni López que acabo de leer.  Los hechos importan menos que los dichos. Y las frases hechas y letanías hacen cada vez más indigestos los discursos. Hechos y faltas entrevera la reflexión y la comedia en relación con todo esto confrontando dos arquetipos: el afilado (y a veces ingenuo) joven atrevido que no acepta otra verdad que la objetiva, y el imponente (y a veces despótico) escritor veterano que repudia que los datos y los hechos comprometan la belleza y la fuerza literaria del relato. Bernabé Rico compensa con algunas dosis de comedia la menor profundidad de este texto respecto de otros de Mamet que él ha versionado (La culpa, Muñeca de porcelana). Hechos y faltas comparte con esas obras la pertinencia de un escenario casi abstracto y un manejo impecable de la luz y el sonido. En cuanto a las interpretaciones, Ángeles Martín aporta el carácter que precisa esa directora que ha de hacer de equilibrista en la pugna entre esas dos edades masculinas; Juan Grandinetti está estupendo ofreciendo matices y gestualidades contenidas a ese joven periodista que es más dañino cuanto más respetuoso parece. Y el gran Antonio Dechent tiene la fuerza que requiere ese escritor, irónico y de vuelta de todo, que toma como afrenta cualquier apostilla. Dechent es un actor magnífico del que no olvido que, cuando apenas se oía hablar de nuevas masculinidades, hizo un trabajo memorable en La voz humana. O que protagonizó de forma soberbia A puerta fría, una joya de película que trataba el drama del precariado en un tiempo en que ni siquiera se usaba esa palabra. Así que ha sido un gustazo tenerlo (y tenerlos) hoy en Avilés en esta noche de estreno y saber que a él lo veremos de nuevo a finales de septiembre, cuando se estrene Cerrar los ojos, la esperadísima nueva película de Víctor Erice.    

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